Miedo
Todos en algún momento hemos sentido miedo, como el miedo a perder algo o a perder a alguien. Ésta es una sensación que nos desagrada, pero hay que valorarla como una emoción que te ayuda a saber que algo dentro de ti está cambiando.
En este artículo voy a centrarme en el miedo a cambiar de vida, de trabajo, el miedo a salir de la zona de confort que todos tenemos. En esa zona nos sentimos protegidos, es donde pensamos que tenemos todo bajo control, y nos da una falsa sensación de seguridad.
Cuando estamos pensando en cambiar algo en nuestra vida que no nos hace sentir del todo satisfechos, ahí está el miedo, siempre al acecho; pero esa sensación es buena y hasta saludable, ya que sin ella nos tiraríamos a una piscina sin agua, o saltaríamos de un helicóptero sin paracaídas. Saber controlar el miedo y aprovecharlo para que nos ayude a revisarlo todo dos o tres veces, nos hace tener más confianza cuando comenzamos algún camino o proyecto nuevo, ya sea un cambio de trabajo o cualquier otro aspecto en el que no nos sentimos del todo satisfechos.
El miedo
Lo malo es cuando ese miedo nos paraliza y no nos permite hacer algo que nos proponemos, o cambiar esa situación que no nos deja desarrollarnos como esperamos. El miedo es bueno dentro de los límites en que podamos controlarlo, lo que no podemos es dejar que el miedo nos paralice y nos domine. Por ello, dejemos los miedos fluir, de ellos aprenderemos a ser más prudentes y a revisar todas las herramientas que tenemos a nuestro alcance antes de comenzar la nueva experiencia y salir del area de confort.
Podemos trabajar sobre ellos y encontrar una manera de verlos como una señal, una señal que nos avisa de que tenemos la oportunidad de volver a revisar nuestra mochila llena de experiencias y vivencias, un par de veces más antes de salir a experimentar ese mundo lleno de nuevas vivencias y sensaciones. Seguro que valdrá la pena, comenzando porque si tú puedes manejar tus propios miedos, ellos no te dominarán a ti, sino que tú los dominarás a ellos.
Lo que me hace reflexionar: «si no tuvieras miedo, ¿qué harías?»
¿Te has puesto a pensar qué podrías hacer si no tuvieras esos miedos? A lo mejor harías lo mismo que haces ahora, o a lo mejor no. Podrías comenzar ese proyecto que tienes aparcado hace tiempo y del que siempre tienes una excusa para seguir dejándolo de lado; podrías comenzar esa experiencia en la que tanto piensas, comenzar otro trabajo o por fin cambiar esa parte de tu vida que no te gusta y que por miedo no lo has hecho. Ésta es la reflexión que os dejo hoy.
Si no tuvieras miedo, ¿qué harías?
Alfonso Suárez – (@CoachAlfon)
Executive & Personal Coach
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